El lifting con hilos tensores es una técnica de rejuvenecimiento facial mínimamente invasivo y traumático, seguro, efectivo y sin cicatrices, obteniendo como resultado una apariencia natural.
Cuando comienza el proceso de envejecimiento, los tejidos conectores se debilitan, el colágeno y la fibras elásticas empiezan a deteriorarse, sus características estructurales de tonicidad y elasticidad cutánea se ven alteradas y por tanto con el paso del tiempo ya no logran contrastar la fuerza de la gravedad y se traslada a otras partes de la cara, modificando el aspecto.
Estos cambios en nuestra estructura de soporte se traducen en forma de flacidez, surcos, pliegues y arrugas profundas que pueden aparecer a partir de los 30 años.
Áreas que se pueden tratar
- Elevar los tejidos flácidos del tercio medio e inferior del rostro
- Levantar cejas caídas
- Reposicionar cejas y rostro asimétrico
- Redefinir el contorno del cuello y la línea de la mandíbula
- Suavizar el envejecimiento prematuro de la piel